Los familiares de una mujer en Perú sufrieron un gran susto e indignación cuando esta ‘revivió’ en su propio funeral.
Rosa Isabel Céspedes fue una mujer que fue conocida a nivel internacional poco después de que perdiera la vida debido a que ‘revivió’ durante su propio funeral. Los familiares de la afectada aseguraron que se trató de una negligencia médica lo que llevó a Rosa Isabel experimentar ese último episodio.
Céspedes tenía 36 años de edad cuando se vio envuelta en un accidente automovilístico en donde su cuñado perdió la vida. Ella y sus tres hijos resultaron lesionados de gravedad. La familia fue trasladada al Hospital Regional de Lambayeque, en donde fue declarada muerta el 25 de abril del 2022. La causa oficial de su muerte fue un traumatismo encefalocraneano severo.
Al día siguiente, su familia ofició una misa y funeral en el cementerio El Carmen, dentro de la ciudad de Ferreñafe, en la provincia de Chiclayo, de donde Rosa Isabel era originaria. Al levantar el féretro con el supuesto cadáver, las personas que lo cargaron escucharon ruidos extraños. Los y las asistentes al encuentro fúnebre pronto se dieron cuenta de que Céspedes abría sus ojos, tocaba el vidrio del ataúd y parecía sudar tras la ventana.
Juan Segundo Cajo, director del cementerio, fue testigo de cómo esta mujer ‘revivió’ y llamó rápidamente a las autoridades. Cuando estas acudieron para trasladar a la mujer al Hospital Referencial de Ferreñafe, una multitud de curiosos y curiosas rodeaban y videogrababan el féretro. Desafortunadamente, minutos después de que Rosa Isabel llegara al centro de salud, esta volvió a perder signos vitales y se declaró nuevamente su fallecimiento.
La familia de Céspedes expresó ante medios locales que buscarían abrir una investigación tras lo sucedido. Esto con el fin de conocer cuál fue realmente la razón de muerte de Rosa. Asimismo y al igual que con el caso del hombre que ‘revivió’ luego de haber sido declarado muerto en China, los familiares pretenden revelar si hubo alguna posibilidad de salvarle la vida que no pudo ser aprovechada debido a que los médicos no se dieron cuenta de que la mujer estaba en un estado de catatonia o de coma.