Sagitario A* es el agujero negro masivo alrededor del cual orbitan todos los astros de la Vía Láctea. ¡Descubre los detalles del gigante estelar!
En los confines del espacio exterior y más cerca de lo que pensamos se encuentra un agujero negro masivo llamado Sagitario A*. Aunque fue detectado por primera vez en 1974, no fue hasta el 2022 que un gran equipo astronómico pudo tomar las primeras imágenes de este cuerpo estelar.
El también conocido como Sagitario A estrella o Sgr A* se encuentra a 26 millones de años luz de la Tierra. Este es el centro de la Vía Láctea, la galaxia a la que pertenece todo nuestro sistema solar. Produce grandes cantidades de radio invisibles para los ojos que, aparentemente, forman dos grandes burbujas que cubren a Sgr A*. Por otra parte, se calcula que el plasma liberado por los bordes del objeto puede alcanzar los 10 millones grados Celcius de temperatura.
Una interpretación de algo cada vez menos inimaginable
Para tomar las primeras fotografías de este agujero negro se necesitó de la colaboración de 300 astrónomos y astrónomas repartidos a lo largo de ocho bases. Al conectarlas de forma remota, crearon el Telescopio Horizonte de Sucesos (EHT, por sus siglas en inglés), el cual tiene sedes en la Antártida, México, Chile, Estados Unidos y España.
El equipo anunció que publicaría en 8 artículos todo lo que descubrieron gracias a las fotografías que tomaron a lo largo del 2017 desde las diversas bases terrestres. El primero de esta serie fue publicado en The Astrophysical Journal Letters. En este se compara a Sagitario A* con el M87*, el primer agujero negro que pudo ser fotografiado desde la tierra, siendo el Sgr A* el segundo.
Mientras las emisiones de plasma del M87* eran constantes y uniformes, las de Sagitario A estrella eran sumamente irregulares. Esto hizo más difícil el poder crear una imagen ‘promedio’ del halo que rodea al agujero negro. Sobre este, se sabe que es creado cuando la luz de diversos planetas y estrellas se distorsiona al llegar a los bordes del agujero negro. Por otro lado, es importante añadir que las imágenes captadas por el EHT son en blanco y negro. No obstante, se decidió añadirles color para complementar la primera interpretación visual del cuerpo celeste.