ERICA es una robot que puede reir con delicadeza o estruendosamente dependiendo de la situación y podría convertirse en la primera actriz de su clase.
El uso de Inteligencia Artificial con robots humanoides ha dado resultados sorprendentes, como Ameca, el robot con las expresiones más humanas que encontrarás, o Sophia, la máquina más inteligente creada hasta el momento. En esta ocasión te presentamos a ERICA, una robot que poco a poco ha aprendido el arte de reir correctamente durante una conversación.
Hiroshi Ishiguro es el creador de ERICA, quien ha sorprendido a los humanos desde sus primeros prototipos en el 2015 y hasta su presentación oficial en el 2018. En ese momento, ERICA era uno de los androides que mejor podía imitar el comportamiento humano dentro de una conversación. Eso sí, la robot nunca ha tenido la capacidad de mover otra cosa que no sea su cabeza.
La popularidad de la robot con Inteligencia Artificial creció tanto que BondIt Media Capital dio 70 millones de dólares para la película b., la cual estaría protagonizada por ERICA. Desafortunadamente, el proyecto parece estar congelado desde el 2020 y no parece haber nuevas actualizaciones sobre su lanzamiento.
A pesar del fallido intento de volverse actriz de Hollywood, ERICA regresó a las noticias internacionales cuando un grupo de ingenieros de la Universidad de Kyoto, Japón, comenzó a enseñarle los matices de la risa a esta robot. Koji Inoue fue el líder de la investigación publicada en la revista científica Frontiers in Robotics and AI. Por otra parte, Divesh Lala y Tatsuya Kawahara fueron los asistentes del proyecto que pretende entrenar a la Inteligencia Artificial para que pueda tener una conversación más empática con los humanos y humanas.
Citas rápidas para entrenar la mente
En su estudio, el equipo explicó que la risa es una forma de que las personas muestren y sientan empatía. Sin embargo, hay diversos tipos de risa que tienen que ser aplicados cuidadosamente dependiendo de cada situación para que las intervenciones sean exitosas. Para poder entrenar a ERICA en los detalles de este tipo de comunicación, el equipo hizo que la robot tuviera ‘citas rápidas’ con diversos estudiantes varones de la universidad.
Durante las citas, la máquina fue controlada por cuatro actrices diferentes. Las conversaciones tuvieron una duración de entre 10 y 15 minutos y al final se obtuvieron 82 piezas que fueron cuidadosamente estudiadas para alimentar la IA de ERICA con la información necesaria. El grupo de investigación definió que esta máquina virtual necesitaba aprender a detectar una risa inicial. La IA también tendría que saber cuándo compartir una risa y cuándo dejar que la otra persona riera sola. Finalmente, ERICA requería definir qué tipo de risa introducir en cada momento.
Con los objetivos claros, el equipo alimentó a ERICA con fragmentos auditivos de diferentes tipos de risa. Algunas eran de los jóvenes y las actrices riendo juntos, otras de alguno de los dos riendo solo y también riendo mientras hablaba. Esto con el fin de poder darle la mayor cantidad de detalles posible al cerebro virtual. Los únicos tipos de risa que no pudieron ser analizados en esta primera etapa de entrenamiento fueron aquellos en donde no se emitía ningún sonido o donde este era muy sutil.
Te compartimos un video de la historia de ERICA.
¿Te gustaría tener una cita rápida con una robot para enseñarle a reir como humano?
Con información de La Vanguardia y Xataca