Decenas de criaturas llamadas ‘dragones de mar’ han aparecido encallados en playas de Australia, lo que ha alertado a científicos y ambientalistas.
Los llamados ‘dragones de mar’ son una especie marina que solamente habita en el mar circundante a Australia. Se encuentran en la lista de Especies Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza y, en un extraño fenómeno, decenas de ellos han aparecido muertos en las costas de diversas ciudades australianas.
Normalmente los ‘dragones de mar’ no se acercan a la costa debido a que residen cerca de arrecifes. De manera cotidiana no suelen alejarse a más de 500 metros de su lugar de origen. Asimismo, conviven con caballitos de mar y otras especies de arrecife y logran medir hasta 45 centímetros. Encontrar este tipo de especies es un reto popular para fans del buceo debido a sus vibrantes colores. Desafortunadamente, los últimos encuentros masivos con esta especie han preocupado a expertos en el medio ambiente.

La oleada de muertes de esta especie se dio en abril del 2022. Vecinos de las playas de Cronulla, Malabar y la costa central de Nueva Gales del Sur reportaron ver diversos cuerpos de estos animales a lo largo de las semanas de abril. David Booth, especialista en ecología marina de la Universidad Tecnológica de Sidney, estimó que la muerte de tantos especímenes tiene que ver con una combinación del “clima impactante, los contaminantes que llegan al océano y las grandes olas” que se dieron en la región previo a encontrar a los ‘dragones de mar’.
Un golpe duro a una especie que ya está en peligro de extinción
El estado de los ‘dragones de mar’ es tan crítico que es ilegal capturar miembros de esta especie e incluso manipular sus cuerpos aunque ya no estén con vida. Sin embargo, Booth pidió a los habitantes de las costas australianas que sigan atentos y atentas en caso de que las muertes continúen. De acuerdo con el especialista, en el 2022 encallaron en la playa 10 veces más ‘dragones de mar’ que en años anteriores.

En los últimos años la muerte masiva de especies ha sido un fenómeno cada vez más común en el mundo. En Reino Unido y México, por ejemplo, decenas de aves han muerto cerca de plantas de gas y eléctricas. Aunque todavía no se ha registrado ninguna extinción, el rápido fallecimiento de grupos enteros de una especie resulta alarmante y es un indicador sobre los efectos que ciertas actividades e industrias humanas pueden tener sobre el medio ambiente en el que se desarrollar.

¿Has escuchado de algo parecido con los animales en tu región?
Con información de Clarín y