Ouka es un perro sin miedo a nada que comparte el mismo amor que su humano por volar en parapente y ver todo desde lo alto.
Shams es un cineasta francés que es parapentista en sus tiempos libres. El hombre descubrió que su perro, Ouka, sentía curiosidad por lo que hacía y no mostraba miedo a las alturas, por lo que decidió enseñarle a volar en parapente. El canino resultó asombrado por las alturas y ahora recorre los cielos tranquilamente con su amo.
El francés cuenta que Ouka es un perro energético que ha sido abandonado dos veces. Aparentemente, sus dueños anteriores no el daban el tiempo y el espacio para correr necesarios. No obstante, desde que Shams lo adoptó el joven notó la temeridad del perro. Cuando Shams iba a volar en parapente, Ouka jugaba cerca de los precipicios que los rodeaban en los Alpes y siempre miraba hacia abajo. No parecía mostrar vértigo o miedo alguno en esos momentos.
Shams tardó aproximadamente mes y medio en entrenar a Ouka para que supera correr, ‘despegar’ y ‘aterrizar’. No obstante, luego de que Ouka aprendiera comandos básicos, el perro samoyedo no tuvo problemas en relajarse y disfrutar del viaje.
La historia de este asombroso dúo se ha vuelto viral gracias a la cuenta de Instagram que Shams creó en nombre de Ouka. Las asombrosas imágenes que comparten en la cuenta los han llevado a tener diversas entrevistas en donde relatan su historia.
Aunque hay personas que aseguran que Shams está abusando de su acompañante cuadrúpedo, el hombre asegura que Ouka es sumamente expresivo cuando no le gusta algo. El parapente, por otro lado, es algo que el canino parece disfrutar con mucha serenidad.